domingo, 1 de mayo de 2011

CARTA CON PERFUME A GARDENIAS Y ALMAS ENAMORADAS


Hola hermana alma de seda, amiga de mi infancia, recibí tu carta y fue como agua de socorro
para mi corazón.
Tu tía Virginia es terrible, me dijo que apenas llegara a Puerto de los almendros, te visitaría para llevarte noticias sobre mi.Le pedí que no te preocupara, pero hay esa tía Virginia siempre queriendo ayudar a todo el mundo...
Disculpa que no te escribiera durante todo el invierno, pero necesitaba darle tiempo al tiempo, pensar mucho y alejar la tristeza para aclarar mis pensamientos.
Mi querida Alma, pase momentos de mucha angustia, y todo lo que me decías en tu carta podían ser distintas opciones, sobre el final de mi bellísima historia de amor.
Leí tu carta tantas veces, que casi aprendí cada palabra de memoria.
Te agradezco tanto que me escribieras, pues tus palabras me fortalecieron, me hicieron reflexionar mucho y vislumbrar una luz de esperanza.
Sabes querida mía, deje pasar los días, pensaba que tenia que darle tiempo al hombre de mi vida, `para que reflexionara en la soledad de su hogar, tenia la esperanza de que algún día se presentaría ante mí y me pediría conversar sobre lo sucedido.
Sabes mi alma de seda...no me equivoque y hoy muy alegre, en este hermoso DIA de primavera, quiero comentarte que mi historia de amor ha tenido un final feliz.
El hombre que había llegado a mi vida, y por quien sufrí tanto, aplaco su enojo y decidió conversar. Sabes amiga mía, todo había sido producto de un terrible mal entendido entre ambos. Si querida alma. hoy en mi presente vuelvo a sonreír y estoy tremendamente feliz de nuevo,
No me equivoque, este hombre si es el hombre de mi vida.
Y sabes alma quise que tu fueras la primera en saberlo amiga querida, gracias por tu carta, fue un gran apoyo para mi en ese momento.
Soy feliz por poder haber encontrado un final feliz a mi historia de vida.
Me despido de tì con el mayor de los abrazos y la más bonita de mis sonrisas.
tu amiga-hermana Jazmín.
                                                                              ALMA DE SEDA