Se trata de una sandía calada, como se dice popularmente: un delicioso pescado asado, envuelto en papel metálico. Ten por seguro que quien lo pruebe, se sentirá en el Paraíso.
La gracia de envolverlo en papel metálico es que te permite asarlo en cualquier tipo de parrilla, eléctrica, a carbón o gas; y quedará igualmente sabroso.
El pescado a usar puede ser corvina, salmón o atún, pero te recomendamos la reineta, que tiene una alta relación precio-calidad, su carne es firme, consistente y magra, por lo que entrega gran versatilidad.
Puedes cocinarla como más te guste, pero te recomendamos usar una cama de cebolla pluma entre el papel metálico y el pescado. Sobre éste puedes usar ajo picado, pimienta, tomate, queso Philadelphia y, en general, los ingredientes o aliños que más te gusten.
Por ejemplo, puedes agregar champiñones, cebolla morada, puerros, pimiento morón, alcaparras, queso amarillo o lo que más te guste. Recuerda que un excelente acompañamiento es el vino blanco, bien helado. Y no olvides que una vez que pongas tus ingredientes favoritos, debes llevarlo a la parrilla y cerrarlo completamente con el papel metálico.
¿Cómo saber cuándo está listo tu pescado? Haz una pequeña abertura en el papel tras unos 10 minutos. Si la carne está blanca, suelta mucho vapor y jugo, indica que está perfecto para servir.
